Cuando Frida era niña, soñaba con ser médica, pero la vida le tenía preparada otra historia. Un accidente la obligó a guardar cama, y fue ahí, con un pincel en mano, donde encontró su verdadera voz.
Desde entonces, pintó su mundo: uno lleno de dolor… pero también de flores, fuerza y color. Este libro cuenta la historia de una niña valiente que convirtió su dolor en arte, y sus sueños en cuadros que hoy recorren el mundo.
Con ilustraciones únicas y datos curiosos al final, es una invitación a soñar en grande, a ser tú mism@, y a encontrar belleza incluso en los días difíciles.
